¿QUIEN ha de llamarle REY?
El domingo pasado, luego de escuchar el sermón dominical... pensaba en los lindísimos momentos que hemos pasado familiarmente en estas fechas conmemorativas de la Semana de la Pasión.
Cuántos recuerdos vienen a mi mente de los domingos de resurrección, de los jueves de pasión, y de los viernes que hacían larguísimos los fines de semana.
Hemos pasado momentos en la playa, en la ciudad, en la iglesia, en provincia... pero en todos aquellos momentos había un sentimiento interno inconfundible: Reconocer que hay un Rey a quién reconocer y venerar.
A veces, me cansaba de ver las mismas películas en la televisión, otras veces, me parecía que la programación en la iglesia no había variado mucho; otras... disfrutaba de las Cantatas o de las Puestas en Escena de los esforzados miembros de la Red de Arte, jeje.
Lo cierto es, que donde estuviera... y sea cual fuere la programación que tendría... eran días únicos para reflexionar en esa forma única de Dios, para acercarse a la humanidad.
Ya he celebrado muchas Semanas de la Pasión, y sigo sintiendo con intensidad ese acercamiento divino; y sigo soñando que mi Tierra, comprenda que ese amor puede ser derramado en todos aquellos que así lo reconozcan.
En estos días, te deseo: paz, reflexión, y por qué no... darle el privilegio a Jesús de caminar nuevamente en tu Jerusalén, pasar por tu Vía Dolorosa, llegar hasta tu Gólgota, y permitirle que Resucite tu vida integral por la vida abundante que El ofreció.
Que sean días de amor, para ti.
Cuántos recuerdos vienen a mi mente de los domingos de resurrección, de los jueves de pasión, y de los viernes que hacían larguísimos los fines de semana.
Hemos pasado momentos en la playa, en la ciudad, en la iglesia, en provincia... pero en todos aquellos momentos había un sentimiento interno inconfundible: Reconocer que hay un Rey a quién reconocer y venerar.
A veces, me cansaba de ver las mismas películas en la televisión, otras veces, me parecía que la programación en la iglesia no había variado mucho; otras... disfrutaba de las Cantatas o de las Puestas en Escena de los esforzados miembros de la Red de Arte, jeje.
Lo cierto es, que donde estuviera... y sea cual fuere la programación que tendría... eran días únicos para reflexionar en esa forma única de Dios, para acercarse a la humanidad.
Ya he celebrado muchas Semanas de la Pasión, y sigo sintiendo con intensidad ese acercamiento divino; y sigo soñando que mi Tierra, comprenda que ese amor puede ser derramado en todos aquellos que así lo reconozcan.
En estos días, te deseo: paz, reflexión, y por qué no... darle el privilegio a Jesús de caminar nuevamente en tu Jerusalén, pasar por tu Vía Dolorosa, llegar hasta tu Gólgota, y permitirle que Resucite tu vida integral por la vida abundante que El ofreció.
Que sean días de amor, para ti.
