3 6 6 días...
"Sembrar discordia entre hermanos"... Les parece un tema cotidiano? Sí lo es. Todo el tiempo estamos rozando unos con otros e interactuando con nuestros familiares y amigos. Muchas veces se nos desliza una palabra, una frase, una oración... o simplemente un lenguaje corporal que indica "mirar a menos", "soslayar", "fingir que no interesa", "disimular"... etc.; y cuando menos lo pensamos estamos diciéndole a otros aquello que en su momento no supimos expresar.
Sembrar discordia entre hermanos, es la punta de un ovillo que no termina de acabarse. Esta es una de las cosas de los seres humanos que Dios todopoderoso detesta. Aquel que se acerca a otro y le dice... "No lo comentes por favor, pero fulan@ de tal... es así y así y dijo ésto o aquello de ti..." Raya con el chisme verdad? Pero ésta actitud es más profunda, pues SEPARA a uno de otro. Propongo que pensemos en esta actitud tan común, y lo contrastemos con el deseo de Dios que aún en sus últimos momentos de vida en la tierra, rogó, oró y sangró por la unidad.