Hay días grises...
Aún cuando uno disfruta de las riquezas no obtenidas con dinero, sino que son una herencia del Creador como: la vida, la salud, los hijos, la familia... "hay días grises". Días que nos hacen repensar la situación en la que vivimos, la motivación de lo que hacemos y la proyección de dónde quisiéramos estar. Es propio también, de la falta de luz solar. Influye mucho una mañana fría, con llovizna, la enfermedad de un ser amado, una mala noticia(y en estos días abundan)... así que es parte de la humanidad tener días grises, pero hay que reconocerlos, y hay que enfrentarlos para que no nos destruyamos en nuestra esencia. Ya el proverbista decía... "sobre toda cosa guardada... guarda tu corazón(que en el pensamiento griego... era la totalidad del ser humano), porque del corazón mana la vida". Que tu día gris... no te destruya. ¡Un abrazo a tod@s!