Mi Padre...
Mi padre partió a la presencia del Señor en el año 2006 a los 81 años. Hoy estaría cumpliendo 88...
Mi Padre fue un hombre forjado y cuajado en la sierra del Perú; y con toda la limitación que allí tuvo, no dejó de lado su amor por el deporte y los caballos.
Cuando lo empecé a conocer yo tenía 12 años, y allí nos hicimos amigos, confidentes y después --grandes amigos--.
1. Fue un hombre LLAMADO al pastorado y supo guiar la Grey que Dios le encargó durante más de 50 años de ministerio.
2. Mi padre NUNCA le debió dinero a nadie. Él siempre nos decía que no deber dinero, era vivir en paz.
3. Mi padre JAMÁS resbaló en su Fe.
4. Era un un hombre lleno del Espíritu Santo. Lo evidenciaba cada madrugada al interceder por sus ovejas y orar en otras lenguas.
5. Mostró su amor en forma limitada, no sabía cómo hacerlo. Cuando aprendió, ya estaba entrado en años y desde entonces lo vi con un ramo de flores para mi madre y/o con una bolsa de fruta al visitar a sus hijos. Cuando nació mi primer hijo me envió una tarjeta...
6. Mi padre me enseñó que vivir de acuerdo al modelo de vida de este mundo, era transitar por el Camino Ancho, me mostró muchas veces el Camino Angosto. No mientas, me decía. Obedece. Sé responsable. Honra a Dios con tu tiempo. Conversa con Él. Medita en Su Palabra. Prepárate espiritualmente.
7. Cuando mi padre supo que tenía cáncer... me pregunto ¿Por qué a mi? En ese momento hubiese querido decirle lo que sé ahora. Sólo lo abracé, y le contesté: yo tampoco tengo una respuesta.
8. Mi Padre fue un hombre muy fiel a sus compromisos eclesiásticos. Siempre honró su denominación y estuvo a la altura de todos sus requerimientos. Tanta fue su lealtad, que al escoger entre llevarme al altar o concordar con el reglamento denominacional, decidió por ellos.
9. Un día antes de partir a la presencia del Señor... Puso sus manos sobre mis hijos, la derecha sobre la cabeza de Diego y su mano izquierda sobre la cabeza de Noelita... y oró largo... musitando, casi en silencio. Hubiese querido oír lo que decía, nunca lo supe, pero siempre tuve la certeza de que en ese atardecer --los dedicó para el ministerio-- .
Cada vez que canto... aunque sea un poquito en casa, no dejo de pensar en la canción que se me pegó después de su muerte. "Uno más para Cristo" Ese siempre fue su lema. Llevar mucho fruto espiritual. "Uno más para Cristo Ruth!! Es como si cada día, volviera a escuchar su voz.
NUESTRO PADRE... no fue un hombre rico en posesiones terrenales, pero él SÍ SUPO cuál era el camino del éxito y la felicidad. Y ese camino nos enseñó. "Acuérdate de tu Creador, en los días de tu juventud, ANTES que vengan los días malos, y luego digas... no tuve en esos años felicidad"
AHORA LO VEO EN MI VIDA... que pasando momentos tan difíciles, tan dolorosos... DENTRO DE MI, hay calma. Hay sosiego, hay paz. Tengo la seguridad de que Dios lo está controlando todo. ¡Estoy muy clara que yo aprendí su lección!. --TE AMO MUCHO PADRE DE MI CORAZÓN... El tiempo pasa veloz y ya pronto nos veremos y el abrazo que nos demos... ese abrazo ya no tendrá fin.
Mi Padre fue un hombre forjado y cuajado en la sierra del Perú; y con toda la limitación que allí tuvo, no dejó de lado su amor por el deporte y los caballos.
Cuando lo empecé a conocer yo tenía 12 años, y allí nos hicimos amigos, confidentes y después --grandes amigos--.
1. Fue un hombre LLAMADO al pastorado y supo guiar la Grey que Dios le encargó durante más de 50 años de ministerio.
2. Mi padre NUNCA le debió dinero a nadie. Él siempre nos decía que no deber dinero, era vivir en paz.
3. Mi padre JAMÁS resbaló en su Fe.
4. Era un un hombre lleno del Espíritu Santo. Lo evidenciaba cada madrugada al interceder por sus ovejas y orar en otras lenguas.
5. Mostró su amor en forma limitada, no sabía cómo hacerlo. Cuando aprendió, ya estaba entrado en años y desde entonces lo vi con un ramo de flores para mi madre y/o con una bolsa de fruta al visitar a sus hijos. Cuando nació mi primer hijo me envió una tarjeta...
6. Mi padre me enseñó que vivir de acuerdo al modelo de vida de este mundo, era transitar por el Camino Ancho, me mostró muchas veces el Camino Angosto. No mientas, me decía. Obedece. Sé responsable. Honra a Dios con tu tiempo. Conversa con Él. Medita en Su Palabra. Prepárate espiritualmente.
7. Cuando mi padre supo que tenía cáncer... me pregunto ¿Por qué a mi? En ese momento hubiese querido decirle lo que sé ahora. Sólo lo abracé, y le contesté: yo tampoco tengo una respuesta.
8. Mi Padre fue un hombre muy fiel a sus compromisos eclesiásticos. Siempre honró su denominación y estuvo a la altura de todos sus requerimientos. Tanta fue su lealtad, que al escoger entre llevarme al altar o concordar con el reglamento denominacional, decidió por ellos.
9. Un día antes de partir a la presencia del Señor... Puso sus manos sobre mis hijos, la derecha sobre la cabeza de Diego y su mano izquierda sobre la cabeza de Noelita... y oró largo... musitando, casi en silencio. Hubiese querido oír lo que decía, nunca lo supe, pero siempre tuve la certeza de que en ese atardecer --los dedicó para el ministerio-- .
Cada vez que canto... aunque sea un poquito en casa, no dejo de pensar en la canción que se me pegó después de su muerte. "Uno más para Cristo" Ese siempre fue su lema. Llevar mucho fruto espiritual. "Uno más para Cristo Ruth!! Es como si cada día, volviera a escuchar su voz.
NUESTRO PADRE... no fue un hombre rico en posesiones terrenales, pero él SÍ SUPO cuál era el camino del éxito y la felicidad. Y ese camino nos enseñó. "Acuérdate de tu Creador, en los días de tu juventud, ANTES que vengan los días malos, y luego digas... no tuve en esos años felicidad"
AHORA LO VEO EN MI VIDA... que pasando momentos tan difíciles, tan dolorosos... DENTRO DE MI, hay calma. Hay sosiego, hay paz. Tengo la seguridad de que Dios lo está controlando todo. ¡Estoy muy clara que yo aprendí su lección!. --TE AMO MUCHO PADRE DE MI CORAZÓN... El tiempo pasa veloz y ya pronto nos veremos y el abrazo que nos demos... ese abrazo ya no tendrá fin.
